Call of Duty es una prueba de que puede haber demasiado de algo bueno. Después de una espectacular carrera de cuatro años, los jugadores se cansaron de la ambientación de la Segunda Guerra Mundial de la serie y abrazaron el anuncio de Call of Duty 4: Modern Warfare con los brazos abiertos. Modern Warfare fue un éxito masivo que hizo de Call of Duty un nombre mundial, por lo que mientras World at War era un éxito en sí mismo, en el momento de su lanzamiento hubo una decidida apatía de regresar a la Segunda Guerra Mundial y el juego finalmente vendió siete millones de copias menos que su sucesor, Modern Warfare 2. Esto convenció a Activision de abandonar por completo la Segunda Guerra Mundial y los siguientes cinco juegos que lanzaron (con la excepción de los Black Ops originales) se establecieron en el futuro cercano o en la actualidad. Tras el anuncio elogiado de Battlefield 1 y la recepción brutalmente pobre de Call of Duty: Infinite Warfare, quedó claro que era hora de volver a las raíces de la serie. Afortunadamente Activision había predicho que esto ocurriría (aunque quizás un año demasiado tarde) y ya tenía Call of Duty: WWII en desarrollo.
Call of Duty: WWII.
A diferencia de las entradas recientes, Call of Duty se planta firmemente en la realidad. Los jugadores asumen el papel de soldado Ronald "Red" Daniels, que es parte de un pelotón en el Regimiento 16 de Infantería. A Daniels se le unen sus compañeros de pelotón: el soldado de primera clase Robert Zussman, un soldado astuto que siempre está buscando problemas, Pvt. Drew Stiles, un virtuoso benefactor, Frank Aiello, un valiente soldado que es un poco descuidado (como diría la madre de Daniels), y el sargento técnico William Pierson, el rudo pero bien intencionado líder del grupo. Durante los próximos dos años, el pelotón incursiona en el teatro europeo participando en batallas famosas como la Invasión de Normandía y la Batalla de las Ardenas. Aquí hay una innegable historia de "Band of Brothers", con lo mejor que sale de los hombres comunes puestos en situaciones extraordinarias. Es difícil discutir los elementos más finos de la trama sin dar demasiadas vueltas, pero basta decir que hay muchos momentos heroicos que jalan las fibras del corazón.
Después de varios años de complots entreverados, Call of Duty: WWII ofrece una historia que regresa a lo básico. Es una historia bien escrita con un diálogo que es noble y divertido en la misma medida y no tiene miedo de incursionar en algunas de las zonas más oscuras de la guerra. Los jugadores, por ejemplo, serán capaces de caminar a través de un campo de concentración. Uno de los puntos más impresionantes de la trama es el hermano de Daniels, que se adentra en la narración de una manera emocional y, en última instancia, sorprendente. Otro aspecto que ayuda a reforzar la historia es que no hay escasez de escenas; el juego tiene cerca de hora y media de cut-scenes.
Tal vez uno de los problemas más grandes con la historia es que salta demasiado, cubriendo batallas en el transcurso de unos años. Esto hace que sea difícil conectarse con los personajes a veces porque nos perdemos de esos tiernos momentos en los que simplemente están sentados esperando el próximo conflicto y conectándose a nivel humano. Esto tiende a ser un problema crónico con Call of Duty y uno que es comprensible, dado que el juego tiene que encontrar la manera de llevarlo a la acción, pero es probablemente el catalizador definitivo que le impide sentirse como una experiencia cinematográfica adecuada. Para ayudarlo a acercarse lo más posible a ese nivel es el elogiable elenco liderado por Josh Duhamel. Duhamel, un actor que no obtiene suficiente crédito con sus casi dos décadas de actuaciones persistentemente satisfactorias, lo da todo por aquí y agrega un desempeño más favorable a su currículum. La actuación sobresaliente es la de Jonathan Tucker, sin embargo, quien es uno de los mejores actores que trabajan hoy en día (observa prácticamente cualquier papel que haya tenido alguna vez para probar esta opinión) y recién ahora está empezando a apreciarlo. Se roba cualquier escena en la que se encuentre, no importa cuán pequeña sea su contribución y tiene una extraña habilidad para moverse sin esfuerzo entre un momento cómico y uno heróico.
Estos personajes ocupan un lugar central en algunos de los conflictos más icónicos durante la guerra más sangrienta en la historia de la humanidad. Después de una breve presentación de su pelotón, los jugadores se suben a un bote y navegan hacia la playa de Normandía. En esta -la secuencia más frenética del juego-, docenas de compañeros soldados son asesinados ya que los jugadores simplemente hacen lo que pueden por asaltar la playa por la fuerza. Es probable que sea la representación más realista del "Día D" hasta la fecha en un juego, y sin dudas es un comienzo fantástico. Otras batallas llevan a los jugadores a lugares como el bosque de Hürtgen, Aachen, el bosque de las Ardenas y más, ya sea a pie, en un tanque o tomando los cielos en un avión de combate. No todas las batallas se sienten apropiadamente climáticas, pero siempre son sólidas. Una de las misiones más emocionantes llamada S.O.E. tiene a los jugadores encargados de derribar sigilosamente un campamento alemán en Argentan antes de competir con un tren a alta velocidad en un Jeep, descarrilándolo en un choque infernal.
En una de las secuencias más interesantes, los jugadores asumen el papel de una agente femenina con la resistencia francesa llamada Rousseau que se hace pasar por una oficial nazi e infiltrarse en su guarnición paraasesinar al Polizeiführer Henrich. Una vez dentro de la guarnición, el objetivo es simplemente caminar y hablar con la gente en el edificio de varios pisos, asegurándose de mantener su fachada. El d-pad se puede presionar para revisar la historia en cualquier momento y los diversos datos deben ser memorizados ya que los soldados nazis comenzarán a hacer preguntas si sospechan. No se dispara ni un solo tiro en lo que posiblemente sea el nivel más largo del juego para aquellos a los que les gusta explorar, por lo que es un cambio notable con respecto a la fórmula estándar de correr y disparar. Una última característica destacable en la campaña es que la regeneración de la salud se ha eliminado, en su lugar se reemplaza por paquetes de salud que con frecuencia se recogen en el campo de batalla y se arrojan desde compañeros de escuadrón. Esta es una actualización fantástica de la serie que no solo aumenta el realismo, sino que evita hacernos perder el tiempo agazapados detrás de una pared sin hacer nada.
En cuanto al modo multijugador en línea, se acabó el típico sistema Create-a-Class y los beneficios, reemplazados por "Divisiones". Los jugadores pueden seleccionar entre cinco divisiones diferentes, cada una con sus propias habilidades únicas. "Infanrty" es una clase de combate de rango medio a largo, "Airborne" es mejor para el sigilo, "Armored" puede ser equipada con gran potencia de fuego, "Mountain" es la clase para francotiradores mientras que "Expeditionary" es buena para jugadores que quieren causar la mayor carnicería con poca finura. Este es un cambio refrescante que hace que el modo multijugador sea más accesible, mostrandole fácilmente a los jugadores qué clase es para ellos y cómo avanzar mejor a través de ella. "War" es el nuevo modo multijugador en la Segunda Guerra Mundial y trae consigo emocionantes objetivos basados en equipos. En "War", un equipo juega como el Eje y el otro como los aliados mientras intentan avanzar como el otro equipo defiende. Por lo general, hay tres fortalezas diferentes que se deben impulsar para ganar el partido. Este es uno de los modos de mayor habilidad, ya que los equipos de jugadores inexpertos tendrán dificultades para tomar mucha distancia, pero cuando incluso los niveles de habilidad se superan, puede llegar al límite.
La mejor adición es la Sede. Dirigiendo el juego hacia una experiencia de MMO tipo "Destiny". "Headquarters" es un centro social en el que entran hasta 46 jugadores entre partidos. Como su nombre indica, es una gran base militar donde los jugadores pueden abrir cajas de suministros, ir al campo de tiro, aceptar desafíos, jugar partidos 1 contra 1 y divertirse socializando. No hay nada revolucionario al respecto, pero lo convierte en un momento innegablemente entretenido.
No hay experiencia de Call of Duty completa sin Zombies y Sledgehammer finalmente prueba su mano en el ya tradicional modo y saliendo triunfante. "Nazi Zombies" pone a los jugadores en el papel de Drostan Hynd (David Tennant), Olivia Durant (Elodie Yung), Marie Fischer (Katheryn Winnick) o Jefferson Potts (Ving Rhames), y son enviados a recuperar arte invaluable pero terminan encontrándose con una legión de zombis nazis creados por el doctor loco Peter Straub (Udo Kier) para fortalecer las filas nazis. Nazi Zombies es quizás el modo Zombies más realista hasta el momento y, aunque se trata de... zombies, es más plausible (usando esa palabra vagamente) que decir, Zombies en el espacio.
También cabe destacar el hecho de que esta es una de las iteraciones más legítimamente atemorizantes hasta el momento, sin duda influenciada por el trabajo previo de Condrey y Schofield sobre Dead Space. Los diseños de zombies son horripilantes y dan más incentivos para deshacerse de ellos lo más rápido posible para evitar ver sus cuerpos desfigurados y escuchar sus gemidos.
CONCLUSIÓN: Call of Duty: WWII será fascinante para estudiar desde un punto de vista comercial: ¿los consumidores adoptarán el producto por el que han estado clamando durante mucho tiempo y cómo hará Activision para llevar adelante su estrategia comercial? ¿Se sumergirán exclusivamente en la Segunda Guerra Mundial hasta que los jugadores se cansen de nuevo o pasen de un ciclo a otro de diferentes épocas? Call of Duty: WWII presenta la historia más asentada de la franquicia en años que no se deleita en una convolución innecesaria, aunque a veces puede parecer demasiado convencional. En combinación con algunos de los cut-scenes visualmente más realistas hasta el momento, hay una historia que merece ser experimentada, incluso si no llega a las alturas de las mejores películas de la Segunda Guerra Mundial. Aquellos que jueguen Call of Duty principalmente como una experiencia multijugador tampoco serán defraudados. La Sede es una adición intrigante que hace que Call of Duty se sienta más orientado a la comunidad. El nuevo modo zombies es más terrorífico y realista que en entradas anteriores. Con Call of Duty: WWII, la franquicia se pone en forma nuevamente, y está claro que Sledgehammer no escatimó esfuerzos para lograrlo. No hay nada revolucionario aquí, pero el juego es tan sólido como es posible y ofrece varias características nuevas notables a la vez que sigue siendo un homenaje admirable a los héroes de esa época.
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